“Estas fechas son una ocasión para que todos disfrutemos en familia y con amigos, pero debemos hacerlo de manera responsable, siendo conscientes del daño que podemos ocasionar utilizando pirotecnia”, señaló el secretario de salud del Municipio, Enrique Rifourcat; y remarcó: “Los estruendos causan efectos negativos en las personas, los animales y el medio ambiente”.
En ese sentido, se detalló que el sonido y las explosiones de la pirotecnia afectan a las personas con Autismo, Asperger, Alzhéimer, Síndrome de Down y discapacidades cognitivas o neurológicas como también a los animales, Los mismos pueden provocar accidentes y lesiones; mientras que los residuos liberados al quemarla contaminan altamente el medio ambiente.
“Las personas con trastorno del espectro autista son hipersensibles en sus sentidos, sobre todo en el auditivo, y la pirotecnia las afecta directamente, provocándoles situaciones de llanto, gritos y hasta autolesiones; en tanto que las personas con Alzheimer pueden padecer desorientación, nerviosismo, insomnio y malestar, producto de los estruendos”, expresó el funcionario.
Por otra parte, también se explicó que los animales tienden a tener una capacidad auditiva mucho más sensible que la de los humanos y la distancia de escuchar es cuatro veces más extensa que la del hombre, de modo tal que los sonidos emitidos por los fuegos artificiales los alteran y pueden causarles problemas en la audición o la pérdida total de la misma.